“En esto descubrieron 30 o 40 molinos de viento que hay en aquel Campo…”. Así describe Cervantes el paso de Don Quijote y Sancho Panza por los molinos de Campo de Criptana, un pueblo de Ciudad Real de más de 14.000 habitantes con unos encantos que no puedes dejar pasar.
¿Tú también quieres pelear contra estos gigantes? ¿O prefieres conocer cómo funcionan? En la actualidad se conservar diez molinos. Puedes visitar uno de ellos y ver su maquinaria del S. XVI. Además, si vas en algunas fechas específicas, podrás ver uno de los molinos en marcha y observar cómo se realizaba la molienda de harina de forma tradicional.
No te puedes ir de Campo de Criptana sin probar su gastronomía. Este rincón cuenta con varias opciones de alojamiento para todos los gustos, así como restaurantes para degustar la cocina manchega. Te recomendamos que visites TripAdvisor y te formes una idea de qué establecimientos se adecuan más a tus gustos.
El barrio con más encanto es el denominado Albaicín. Un típico barrio manchego con las casas pintadas de blanco y añil, tal y como se pintaban en la época musulmana. La mejor recomendación para disfrutar de este barrio es perderte y admirar sus sinuosas calles y características casas.
Si te quedas más de un día y quieres conocer a fondo esta población puedes visitar su Pósito del S. XVI, ahora Museo Municipal, la Casa Cueva o su gran iglesia situada en la Plaza Mayor.
Y recuerda que «aquellos que allí se parecen no son gigantes, sino molinos de viento.»
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