Granada es una ciudad llena de atractivos, rincones y actividades con las que disfrutar. Si tu paso por ella va a ser más bien corto, no te preocupes, aquí tienes todo lo que no te puedes perder.
La Alhambra
No podía ser de otra forma. Si vas a Granada y no la visitas, te perderás una maravilla conocida a nivel mundial. Son los restos de la ciudad árabe que tiene su origen en el siglo IX. En ella se conservan numerosas zonas, como los baños árabes o el Generalife, la residencia de verano de los reyes musulmanes.
Cada parte de la Alhambra te da unas vistas distintas: A Sierra Nevada, al Albaicín, al casco antiguo… Sin duda supieron elegir bien el enclave para situar esta obra arquitectónica.
Sin duda, la parte más impresionante es la de los Palacios Nazaríes, donde se encuentra la famosa Fuente de los Leones. En esta zona es imposible transportarse a la época del Al-Ándalus, y es que la arquitectura y decoración árabe impresionan a todo aquel que los conoce en primera persona.
Verlo por completo te lleva más de medio día, pero merece la pena. Conviene comprar su entrada online con toda la antelación posible, ya que el aforo es limitado y se agotan con rapidez.
La Catedral
Cambiando totalmente de cultura y religión, en el centro histórico de Granada se localiza su catedral. Es de un tamaño majestuoso y, además de los frescos de su altar, los dos órganos que se pueden ver desde el pasillo central no pasan nada desapercibidos.
En la parte denominada Capilla Real se encuentran los sepulcros de los Reyes Católicos, los cuales pasaron a la historia con finalizar con éxito la Reconquista tras la toma de Granada en 1492, mismo año en el que Cristóbal Colón llegó por primera vez a América.
La entrada no es gratuita. La entrada a la zona principal de la Catedral es de 5€, y para la Capilla Real 4€. Pero aunque no vaya a entrar, merece la pena a ver su exterior, el cual es tan impresionante como su interior.
El Albaicín
Las calles estrechas y sinuosas siempre tienen un encanto especial. Por eso es vital darse un paseo por el Albaicín durante tu visita a la ciudad. Algunas de sus calles están llenas de tiendas, restaurantes y teterías árabes, decoradas de forma que pensarás que te encuentras en Marruecos.
En este barrio se encuentra el Mirador de San Nicolás. Este rincón está siempre lleno de gente y tiene muy buen ambiente. Durante el día hay algunos puestos, y rara vez no se oye flamenco. Pero lo que la gente viene principalmente a ver son las vistas de la Alhambra. Además, al fondo queda Sierra Nevada, en la que gran parte del año se puede apreciar la nieve.
Paseo de los Tristes
Aunque por su nombre no de la sensación, esta avenida es un precioso pasaje de Granada, ya que pasa por el lado del río Darro. En él hay varias tiendas y restaurantes, y sus vistas son bonitas tanto de día como de noche.
Su nombre se debe a que es el camino que hay que tomar para ir al cementerio, por lo que los funerales siempre pasaban por aquí. Otros dicen que es el paseo que tenían que dar los condenados antes de ser asesinados.
Carmen de los Mártires
Este gran jardín se encuentra en la subida hacia la Alhambra. Es un parque lleno de vegetación, fuentes y caminos en los que perderse. Incluso te encontrarás con unos cuantos pavos reales. No suele estar muy lleno de gente, por lo que es perfecto para descansar y relajarse.
No creas que esto es todo lo que tienes que ver en Granada, pero, como he dicho, son los atractivos más importantes de la ciudad, y por lo tanto, los que no te puedes perder si tienes poco tiempo en ella. En el siguiente artículo puedes descubrir otros puntos y actividades que cualquier granadino te recomendaría.
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