Una de las excursiones que hicimos durante nuestro viaje a Marruecos fue a Essaouira. Nos llamó por su bonito puerto y su tradición pesquera. Sin embargo, lo que desconocíamos es que esta población del oeste de Marruecos está muy ligada al estilo de vida hippie.
Essaouira se encuentra a 180 km de Marrakech. Si tienes ocasión, por el camino puedes parar en una de las Cooperativas Femeninas de Argan, donde puedes conocer más sobre este producto y sus propiedades, ver cómo se elabora y comprar de forma directa a estas mujeres. Asimismo, también puede que os encontréis por el camino con algunos árboles llenos de cabras, pero como os indico en este artículo, esta es una de las mentiras que muchos turistas se creen en este destino: 7 mentiras que hacen creer a los turistas en Marruecos.
Qué ver en Essaouira
Una vez se llega a Essaouira, se puede observar que gran parte de la población está formada por apartamentos turísticos y playa. Es un destino nacional muy importante en verano y al que acuden muchos veraneantes. Como curiosidad, verás hombres en las rotondas que mueven unas llaves. Eso significa que ofrecen su apartamento a los turistas. Yo dejaría de lado esta parte del pueblo y me centraría en su casco histórico y puerto, que es donde realmente está su belleza y peculiaridades.
El casco histórico o medina de Essaouira es Patrimonio de la Humanidad, y bien merecido. Está delimitado por unas murallas del siglo XVIII y una de las zonas con más ambiente es la Plaza Moulay Hassan. Sus estrechas calles tienen un aire decadente pero bello que bien puede recordar a otras zonas del mundo como Oporto, en Portugal. Uno de los aspectos que me llamó la atención como amante de los animales es la cantidad de gatos que hay en las calles. Gatos que duermen en cualquier parte (las mesas de los bares, el suelo, las ventanas…) y que están bien gorditos, vamos, que hambre no pasan. Además, no tienen problema en acercarse a ti para que les des algún mimo. Nunca había visto unos gatos callejeros tan felices.
Su aire hippie ya comienza a notarse en estas calles, pues se pueden encontrar numerosas galerías de arte y tiendas de antigüedades. Como pasa en muchas poblaciones de Marruecos, las calles están llenas de puestos de comida, recuerdos, ropa… Y el tráfico de viandantes es incesante, sobre todo por la mañana. En comparación con Marrakech, los precios son más bajos y no los inflan tanto a los turistas, por lo que os aconsejo adquirir aquí algunos de los productos que hayáis pensado llevaros de recuerdo.
Otra bonita zona de Essaouira es el bastión defensivo, que está en el extremo norte de las murallas. En esta parte se conserva la parte de la muralla que da directamente al océano y las cañones que apuntan a él. Además, junto a él está el barrio judío o Mellah, algo más descuidado pero igualmente interesante.
No podemos dejar de visitar su puerto pesquero, en el que abundan las típicas barquitas de color azul y los pescadores preparando y ofreciendo su pesca del día. Os aconsejo que llevéis un pañuelo impregnado en colonia para taparos la nariz, porque si os adentráis hasta el final (algo aconsejable), os expondréis a uno de los olores más nauseabundos que yo he sufrido durante mis viajes (en el suelo hay centímetros y centímetros de escamas podridas, cabezas de pescado, etc, por eso mismo es mejor llevar zapatillas que sandalias).
Al lado del puerto están los típicos puestos en los que se puede degustar marisco y pescado fresquísimo. Nosotros no pudimos resistirnos a probarlo y estaba buenísimo. Si decidís comer aquí, acordaos de regatear el precio, como ocurre en el resto del país, el regateo está a la orden del día. En el puesto en el que nosotros comimos los camareros y el dueño me instaron a meterme literalmente hasta la cocina para hacerme una foto.
La historia hippie de Essaouira
Como os he comentado al principio, Essaouira es una población muy ligada a la cultura hippie, algo que no me esperaba para nada, era un aspecto que no pensaba encontrar en ninguna población de Marruecos (culpa mía y de mis prejuicios). Desde 1998 se celebra aquí el Festival de Música Gnaoua. Este festival atrae a nada menos que medio millón de visitantes de todo el mundo. El gnaoua es un estilo de música de origen subsahariano que tiene tintes místicos e hipnóticos. El estilo de vida de las personas de esta cultura es similar al practicado por los hippies.
No obstante, la historia de los hippies en Essaouira es anterior a este festival. En la década de los 60 comenzaron a llegar personas de diferentes partes del mundo con la idea de alejarse de la cultura de la que venían y disfrutar libremente de un lugar en el que el tiempo había parecido detenerse.
Esto hizo que la cultura hippie comenzara a establecerse aquí y que incluso jóvenes de Marruecos viajen hoy en día a Essaouira para respirar este aire bohemio. Por eso, en esta población es común ver personas con vestimentas y peinados de lo más variopintos, algo que es difícil encontrar en el resto del país.
En el verano de 1969 hubo una visita que acrecentaría el interés por este lugar: Jimi Hendrix permenació durante 11 días en Essaouira y se alojó en el Hotel du Pacha, actualmente el Hotel Riad al Medina. De ese viaje persisten a día de hoy numerosas historias, algunas de ellas verdaderas y otras falsas, pero sin duda Jimi Hendrix dejó huella en Essaouira.
Cómo ir de Marrakech a Essaouira
Una de las opción para ir a Essaouira desde Marrakech es la del autobús. Desde la estación de autobuses de la estación hay salidas todos los días por alrededor de 50 dirhams. Sin embargo, cuando nosotros fuimos, nos encontramos con un grupo de españoles a los que les había dejado tirados el autobús en Essaouira y no tenían como volver, por lo que no sé hasta qué punto son fiables.
Nosotros fuimos con un guía, Moha de Mohaventura, que nos llevó en su 4×4, parando antes en una Cooperativa Femenina de Argán y varios miradores, y contándonos numerosos datos interesantes sobre esta zona de Marruecos. Nos dejó en Essaouira y acordamos una hora con él para volver a Marrakech. Es sin duda la forma más cómoda de llegar hasta aquí.
Si vas con tu propio coche o has alquilado un vehículo, hay que tomar la carretera N8 y después la R207, aunque es aconsejable que llevéis GPS. Desde Marrakech se tarda en llegar alrededor de 3 horas, por lo que conviene salir con tiempo para poder aprovechar bien el día.
6 comentarios
No había oído hablar de este pueblo! Qué curioso que tenga tradición hippie jejeje.
Tengo muchísimas ganas de visitar Marruecos!
Pues te aconsejo que si tienes tiempo te pases por Essaouira, ¡seguro que te gusta!
Me ha gustado leerte porque me has descubierto un poquito más de esta ciudad marroquí que para mi es una gran desconocido. Bueno, no tanto. Sabía de su festival del música, pero no imaginaba que pudiera concentrar a tanta gente… 🙂
La verdad es que es impresionante que se concentre tanta gente en el festival teniendo en cuenta la población normal de Essaouira. Sin duda es un destino muy recomendable.
¡Un saludo!
Desde luego que es turística Essaouira, y bien merecido, la verdad. Me gustó mucho ese toque hippie del que hablas cuando la visité el pasado mes de febrero. No sabía que Jimmy Hendrix había pasado por allí. Siempre se aprende y se recuerdan cosas leyendo a otros bloggers. Mil gracias.
No hay de qué, como dices al leernos descubrimos cosas que no sabíamos de lugares que conocíamos. A mí también me gustó mucho el ambiente hippie de Essaouira.
¡Un saludo!
Eva