Dan Brown y Barcelona: las localizaciones de ‘Origen’

Barcelona es una ciudad capaz de inspirar a pequeños y grandes escritores. Uno de los últimos que ha caído en sus redes ha sido Dan Brown. Continuando con su famosa saga que comenzó con El Código Da Vinci, gran parte de la historia de su novela Origen (2017) transcurre en Barcelona. Vamos a hacer una ruta por las localizaciones que Dan Brown eligió plasmar en su libro.

1. Monasterio de Montserrat

La historia comienza en un lugar emblemático y cercano a la Ciudad Condal: el Monasterio de Montserrat, que se encuentra a 55 km de Barcelona. Es aquí donde Edmon Kirsch reúne a los representantes de las tres principales religiones del mundo para desvelarles su gran descubrimiento. Concretamente, les revela el secreto en la Biblioteca de Montserrat que, tal y como apunta el obispo, es inaccesible para la mayoría de los visitantes.

Imagen de falco
 

2. Casa Milà

La Casa Milà es una de las construcciones más conocidas de Gaudí. Localizada en el Paseo de Gràcia, en la novela de Dan Brown vive en ella Edmon Kirsch. Aunque el personaje no exista en la realidad, sí que es completamente cierto que, aunque hay una planta que los turistas pueden visitar, gran parte de la Casa Milà está habitada por diferentes inquilinos.

No obstante, en el libro se apunta que Edmon Kirsch había alquilado todo el ático de la Casa Milà. Explican que esta parte es un museo dedicado a Gaudí, pero que el personaje, Edmon Kirsch, había pagado una sustanciosa cantidad de dinero para que lo cerraran y cedieran durante dos años. En la novela, Dan Brown describe cómo es La Pedrera, hablando de su forma sinuante, sus grandes patios de luces, la terraza…

Los sinuosos balcones y la irregular geometría del edificio le proporcionan un aura orgánica, como si los milenios que lleva soportando el azote del viento hubieran erosionado la fachada y creado huecos y curvas como las del cañón de un desierto.

Dan Brown – Origen
 
 

3. Sagrada Familia

La gran obra de Gaudí no podía quedar de lado en Origen, es más, es una parte fundamental de la historia. Siguiendo las pistas para encontrar el código que desbloquee el enigmático secreto de Kirsch, Robert Langdom y Ambra Vidal van hasta ella.

La basílica de la Sagrada Família ocupa toda una manzana en el centro de Barcelona. Pese a sus colosales dimensiones, casi parece flotar ingrávida sobre el suelo, como un delicado conjunto de torres etéreas que ascienden sin esfuerzo hacia el cielo de la ciudad.

Dan Brown – Origen
 

Dan Brown describe la historia, características y misterios de la Sagrada Familia, e incluso apunta a que se afirma que será terminada en el 2026, fecha que coincide con el centenario de la muerte de Gaudí (lo mismo que me dijeron a mí cuando visité el templo).

 

3.1 Cripta de la Sagrada Familia

Edmon Kirsch había hecho una gran donación a la Basílica de la Sagrada Familia a cambio de exponer el libro Las obras completas de William Brake en la cripta del templo, lugar donde se encuentra enterrado Gaudí. Langdom y Ambra bajan hasta ahí siguiendo la pista del científico.

«Una de las criptas más grandes de Europa», pensó el profesor, mientras admiraba el amplio espacio circular. Tal y como recordaba, el mausoleo del sótano de la Sagrada Família era una rotonda de altos techos abovedados, con bancos que podían acomodar a cientos de fieles.

Dan Brown – Origen
 
Imagen de Antonio Tajuelo
 

3.2 Escalera de Caracol de la Sagrada Familia

La calma en la Sagrada Familia se rompe, pues Langdom y Ambra se ven perseguidos por una persona que lleva una pistola y pretende silenciarlos. En su huida, ellos y el padre Beña comienzan a subir la impresionante escalera de caracol que Gaudí diseñó para la Sagrada Familia. En ella se da una lucha entre Langdom y su persectuor, el almirante Ávila, que acaba con este último desplomándose por el hueco de la escalera.

Se asomó entonces por el borde interior de la escalera hacia la vertiginosa caída del hueco central, un pozo estrecho y circular que descendía en picado por el ojo de una estructura semejante a un nautilo gigantesco, sin barandillas ni barreras protectoras, más allá de un pequeño reborde a la altura del tobillo, que no ofrecía ninguna seguridad.

Dan Brown – Origen
 
 

4. Gran Hotel Princesa Sofía

Buscando a Winston, el superordenador de Kirsch, Robert Langdom le pide al conductor del helicóptero que les lleva que se dirija hacia el Camp Nou, el estadio del Barça. De ahí quieren ir al Gran Hotel Princesa Sofía, pues Kirsch comía prácticamente a diario en el club privado del hotel debido a su localización, por lo que Langdom espera encontrar su centro de trabajo cerca. Asimismo es el hotel que elige Langdom para alojarse.

 

5. Barcelona Supercomputing Center (BSC)

Una vez han localizado el hotel desde el helicóptero, Robert Langdom parece encontrar el lugar que estaba buscando. Pese que a él se piensa que es el Palacio de Pedralbes, al final resulta ser un sitio completamente distinto: una iglesia. Pero no una iglesia cualquiera, pues en su interior se localiza el Centro Nacional de Supercomputación.

Cuando yo me leí el libro, pensaba que este lugar era ficticio, pero no, es completamente real. Una parte del Barcelona Supercomputing Center está dentro de una capilla. Por fuera conserva la apariencia de un templo, pero por dentro es uno de los lugares más modernos y futuristas que se pueden ver.

Imagen de IBM Research

Allí, un ultramoderno vestíbulo de cristal se superponía al exterior de la fachada antigua, confiriendo a la iglesia el aspecto híbrido de un edificio a caballo entre diferentes siglos.

Dan Brown – Origen
 

Si tienes mucha curiosidad por conocer el sitio, puedes visitar una parte de este centro, la capilla Torre Girona, donde se encuentra el supercomputador MareNostrum. Para visitarlo debes rellenar el formulario de esta página web.

 

6. Teleférico de Montjuïc

Al día siguiente, tras conocer la verdad de todo lo ocurrido y revelar el secreto de Edmon Kirsch, Langdom decide subir en teleférico hasta el Montjuïc. Es allí donde se da cuenta de que Kirsch y Winston habían planeado cómo conseguir que el mensaje tuviera mucha más audiencia, pero que Winston había ido todavía más lejos.

Sentado en una cabina del teleférico, a mitad del ascenso, Robert Langdon contemplaba el verde paisaje que se abría a sus pies, aliviado por haber dejado atrás el tráfico de la ciudad.

Dan Brown – Origen
 
Imagen de JoaquinAranoa
 

Artículos relacionados

Deja un comentario

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.